Combatir el hipertiroidismo

¿Se ha de seguir alguna dieta para el hipertiroidismo? ¿Hay alimentos vetados para las personas que lo padecen? En dueto cocina urbana queremos darte algunos consejos a seguir a la hora de llevar una alimentación adecuada.


Antes de nada, tenemos que tener claro que el hipertiroidismo supone una producción insuficiente de hormonas tiroideas. Es decir, la glándula tiroidea se debilita y disminuye su segregación.


Para estimularla tenemos que dar preferencia en nuestros platos a los alimentos ricos en yodo y a otros que fomenten su absorción para así reforzar el organismo. El hipertiroidismo se manifiesta de varias formas a nivel metabólico, neuronal y cardiocirculatorio. Se trata de una afección que se puede contraer por ejemplo por una mala alimentación, por el estrés, la exposición a toxinas y otros hábitos poco saludables.


Este desequilibrio hormonal conlleva una serie de síntomas ante los que debemos estar alerta. Por ejemplo, cambios bruscos de humor, sensibilidad al frío, aumento o pérdida de peso, depresión o piel seca. También puede darse una caída excesiva del cabello.


Cuando detectemos alguno de estos síntomas, puede que el especialista nos recomiende empezar con una dieta para el hipertiroidismopara acelerar el metabolismo y fomentar la producción de hormonas tiroideas evitando el aumento excesivo de peso.


Hablamos de una serie de reacciones químicas que se dan en el organismo y mediante las cuales la energía proveniente de los alimentos se transforma en el combustible que necesitamos para vivir.



Decíamos antes que el yodo es una sustancia fundamental para la función tiroidea. Consumiendo alimentos ricos en este mineral podemos controlar la ansiedad que comentábamos antes y algunas molestias digestivas como la inflamación y la indigestión. El yodo podemos obtenerlo de un amplio abanico de alimentos que nuestro médico nos relatará cuando nos indique cómo tratar el hipotiroidismo.


Alimentos de la familia de las crucíferas como la col, el repollo y el brócoli. También nos vienen bien las legumbres por su alto contenido en ácidos clorogénico y cafeico. En una dieta enfocada a combatir el hipotiroidismo encontraremos además apio, naranjas, zanahorias, higos, lechuga, pimientos, pepinos o uvas.


De hecho, los frutos carnosos presentan un elevado contenido en ácido elágico, encargado de regular la producción de hormonas tiroideas. Los frutos secos como las castañas o las nueces, también son muy ricos en este ácido elágico.



También podemos probar a introducir en nuestros platos algo que es muy popular en otros países: el aceite de coco. Acelera el metabolismo y estimula la producción de hormonas tiroideas. Además, tiene propiedadesantibióticas y antifúngicas, es decir, que combaten hongos y bacterias.


Consulta bien acerca de la cantidad diaria recomendada aunque lo normal son 3 cucharadas soperas como máximo. Además de lo anterior, las vitaminas del complejo B son esenciales para la salud de nuestra glándula tiroides. Por ejemplo la riboflavina (B2) fomenta la producción de hormonas tiroideas; la niacina (B3) ayuda al funcionamiento de todas las glándulas del cuerpo y la piridoxina (B6) hace que la tiroides aproveche bien el yodo que ingerimos a través de los alimentos.